Según un columnista del New York Times (2 de enero), la “incapacidad para desconectarse” (ITSO) es “una maldición moderna”. Pero, ¿se trata de una afección médica realmente diagnosticable?

No, no está en el DSM-V. En la atención de la salud mental occidental, no se percibe como una condición patológica, aunque en mi experiencia profesional, puede contribuir al desarrollo de una.