Existe alguna evidencia que sugiere que la molécula activa de THC en el cannabis ayuda a despejar las placas de beta-amiloide en neuronas humanas enfermas (en el contexto de una placa de Petri).
Los cannabinoides eliminan las proteínas del Alzheimer formadoras de placa de las células cerebrales – Salk Institute for Biological Studies
Sin embargo, se necesitaría evidencia real de alto nivel para afirmar tal cosa.
El cannabis extremadamente alto en THC no debe usarse como medicamento a menos que las opciones sean bajas y el tratamiento convencional sea limitado / tenga efectos secundarios muy graves. Demasiado THC no es algo bueno (deterioro de la memoria, control de los impulsos, psicosis por nombrar algunos), pero tener comestibles con cantidades bajas a moderadas de THC acompañado de CBD puede ser la forma más adecuada de usar cannabis. El cannabis de hoy ha sido criado en el mercado negro para una potencia máxima, por lo que cualquier paciente médico ingenuo correría el riesgo de tener una experiencia desagradable si decidiera fumarlo. Vaporizar o tener cannabis infundido en un aceite es la forma más médicamente segura y de menor riesgo de ingerirlo, con la condición de que esté probado en laboratorio y tenga una etiqueta de dosificación adecuada.