Los efectos informados con frecuencia de Adderall son el aumento de los niveles de energía, una mayor capacidad de concentración y la capacidad de concentración, así como una sensación de euforia. Estos efectos mencionados también están típicamente asociados con Meth. Esta característica común se debe a que Meth tiene una estructura química similar a Adderall, pero con un grupo metilo adicional unido a su nitrógeno.
Sin embargo, esta diferencia de un solo grupo metilo también es responsable de la variación entre estos dos fármacos. Por ejemplo, se cree que el grupo metilo aumenta la solubilidad en lípidos de la metanfetamina, lo que le permite penetrar la barrera hematoencefálica más fácilmente que Adderall. Además, el grupo metilo permite que Meth sea más resistente contra la degradación enzimática por Monoamine Oxidase (MAO). Por estas razones, Adderall (cuando se toma en la cantidad prescrita) se considera menos neurotóxico que Meth.
Tanto Adderall como Meth producen un “alto” al dirigirse a Dopamina, el “neurotransmisor de placer”. Sin embargo, se ha demostrado que el Meth aumenta los niveles de dopamina, más que Adderall.
Aunque Adderall también tiene un alto potencial de abuso, se ha demostrado que tiene menos efectos adversos que el Meth, debido a su menor potencia.
Adderall y Meth pueden compartir una estructura y un rango de efectos similares, pero difieren en el estado legal, la potencia y la duración.