¿Estás listo? DESCANSO – y deja que las habilidades curativas naturales del cuerpo “calmen” la articulación.
Esto no pretende ser una respuesta “inteligente”, y si encuentra una mejor, hágamelo saber ya que estoy anticipando el reemplazo parcial de rodilla en la próxima década (actualmente tengo 44 años y soy demasiado joven para eso, entonces ¡cualquier respuesta que encuentres podría beneficiarme también!)
Otros consejos que me ayudan a diario:
- Intenta evitar doblar más allá de 45 grados (y ciertamente no más allá de 90). A medida que la pierna se dobla, tira de la rótula más cerca de los bordes del fémur y los huesos de la tibia. Cuanto más contacto tiene la rótula, más dolor.
- El hielo es tu mejor amigo.
- Fortalecer, fortalecer y fortalecer Aunque es una articulación simple, la rodilla artrítica puede comenzar a “rastrear” incorrectamente, lo que produce más inflamación y dolor. Haga que un terapeuta evalúe su estructura muscular y asegúrese de que su simetría sea pareja (particularmente los cuádriceps y la VMO)
- Haz tus ejercicios
- Yoga: ayuda a mejorar la flexibilidad y la circulación en las articulaciones.
- Deja de correr. El martilleo constante del funcionamiento ayudará a prolongar la vida útil de la articulación
- Vea a un cirujano ortopédico inmediatamente (si aún no lo hizo), pueden determinar el daño en la articulación y darle una buena idea de la atención a largo plazo
No sé cuántos años tienes o qué estilo de vida llevas, pero puedo asegurarte con certeza que perder la función óptima de cualquier parte del cuerpo es algo difícil de manejar (física y mentalmente).
Solía imaginar mi retiro como jugar al tenis, al golf, correr por la playa y pasar largas vacaciones de esquí. Ahora, me levanto todas las mañanas a las 5:45 para fortalecer y estirar mi cuerpo para empujar el reemplazo de rodilla un año más, o un mes o una semana.
A pesar de tener todos los signos de advertencia ya a mediados de los 20, seguí empujando y empujando hasta que la articulación se rindió. ¡Ahora desearía haber tenido uno de esos momentos de “carta a mis 16 años” y me recordé a mí mismo que podría necesitar mis rodillas después de los 45!
Buena suerte para ti, escucha a tu cuerpo.
PD: No soy médico de ninguna manera, así que mi consejo es solo por experiencia personal.