Muchos (pero no todos) los opiáceos tienen el efecto secundario de la retención urinaria. La razón es una combinación de dos efectos que tienen en el sistema nervioso autónomo:
La sobreestimulación del sistema nervioso simpático hace que el esfínter de la vejiga se tense, por lo que a la orina le cuesta más atravesarlo y puede retroceder cuando intenta salir de la vejiga y entrar en la uretra (el punto en el que se encuentra el esfínter o “puerta”). situado).
La inhibición parasimpática del sistema nervioso disminuye la sensación de plenitud de la vejiga.