Cómo controlar el exceso de pensamiento y la enfermedad en el hogar

Uno de los métodos más poderosos para influenciar tu mente (y tus pensamientos) es actuar físicamente de la manera que deseas comenzar a pensar.

Para su caso específico, solo usted puede detallar lo que eso significa. Siéntese y visualice cómo se verían sus acciones cotidianas si NO estuviese pensando excesivamente o estuviera excesivamente nostálgico. Una vez que tenga esa imagen en su mente, intente establecer una rutina que le facilite participar en esas actividades.

Con el tiempo, su pensamiento comenzará a moldearse para estar de acuerdo con sus acciones. Inicialmente, elegirá acciones para replantear su pensamiento, pero con el tiempo, su mente comenzará a creer que sus acciones son el resultado de su pensamiento.

Lo más importante es que eres consciente de que estás pensando demasiado. Algunas personas ni siquiera se dan cuenta de cómo complican las cosas si piensan demasiado. Si no te sientes cómodo con la primera suposición, estarás más nervioso e intentarás por segunda vez. adivine todo el tiempo. Entonces es más difícil enfocarse en hacer las cosas cuando usted tiende a pensar demasiado, eventualmente esto puede producir peores resultados de lo que podrían haber sido.

Trata de renunciar a esa concepción o idea de cómo se debe hacer algo o lo que sea que estés haciendo puede no ser tan difícil. Tu lucha está en la cabeza. Una vez que te das cuenta de esa tendencia al exceso de pensamiento, decide una fecha límite para finalizar esa decisión como 1 hora de pensar Acepte lo que elija y luego concéntrese y actúe en consecuencia. Incluso si vuelve a pensar demasiado, deténgase y ayude en su lugar. Confíe en su mente y capacidades. Una vez que haya intentado seleccionar la decisión que tomó y obtenga los resultados correspondientes, está seguro. que hiciste esto sin pensar demasiado, pero del otro lado si el resultado no es favorable, no intentes hacer múltiples conjeturas, tomaría más tiempo y además estas suposiciones no se pueden convertir en acción. Finalmente, al practicar puedes tomar la primera media hora para Decida las suposiciones o las elecciones e involúcrese en otra actividad y regrese en sus pensamientos durante media hora para decidir sobre la decisión final sobre qué acción se debe tomar.

En realidad, no tengo tendencia a pensar demasiado. Puedo elegir esa suposición según me sienta bien y actuar en consecuencia. Principalmente trato de corregir mi pensamiento basado en prueba y error.