Puede haber múltiples razones para esto. Los médicos de familia no están capacitados en todas las condiciones posibles que afectan la audición; debe obtener una referencia a un audiólogo.
Una posibilidad, sin embargo, podría ser el Trastorno de procesamiento auditivo. En este trastorno, la audición de la persona es normal, pero la transmisión al cerebro tiene problemas. A veces, esto significa una incapacidad percibida para escuchar y, a veces, la persona es consciente de que está escuchando pero no puede comprender. Busque el excelente libro de Teri James Bellis, “Cuando el cerebro no puede oír”, para comprender más sobre el trastorno del procesamiento auditivo.
Sin importar si se trata de APD u otra cosa, un audiólogo definitivamente podrá darle más información y realizar más pruebas de las que puede hacer su médico de cabecera.
