Obstetricia histórica: si una mujer embarazada tuvo un accidente en Nueva York en 1964, ¿qué pruebas haría su médico para asegurarse de que el bebé estaba bien?

Los monitores fetales electrónicos aún no estaban muy extendidos. El ultrasonido tampoco estaba disponible. El médico utilizaría principalmente un fetoscopio obstétrico (un estetoscopio que se asemeja a la luz de un minero y se ajusta en la frente). Esto permitió que dos manos libres palparan el abdomen para localizar el dolor y escuchar el latido del corazón. La mayoría de las veces en accidentes (caídas o accidentes automovilísticos) la madre corre más riesgo de sufrir lesiones que el bebé, ya que el envase del bebé en el líquido es bastante protector. Entonces la principal preocupación era evaluar el daño a la madre.