Uno podría ser anémico sin pérdida de sangre previa, por ejemplo, debido a problemas de médula ósea, deficiencias vitamínicas, etc., entonces no hay problema.
Si no hay anemia, la sangre se volvería demasiado viscosa y podría causar problemas circulatorios, aunque la comunidad deportiva cree erróneamente que les permitirá obtener mejores resultados, nunca se ha demostrado.