La resistencia bacteriana a las fluoroquinolonas como la ciprofloxacina ha ido en aumento en los últimos años. Si el análisis de orina confirma que efectivamente tiene UTI, es probable que su médico le dé un tratamiento empírico usando un antibiótico diferente con un mecanismo de acción diferente. La cefalosporina de nueva generación en forma oral como Cefixima, etc. puede ser una de sus opciones. O incluso las betalactamas habituales. También se necesitará un cultivo de orina y una prueba de sensibilidad para aislar al culpable bacteriano exacto.
La IU recurrente, especialmente en hombres, puede requerir un análisis adicional para determinar la causa de la recurrencia. Puede haber otra patología que deba abordarse, como afecciones de la próstata, cálculos urinarios, etc.