Esto se puede confirmar de dos maneras:
Evidencia clinica:
Amarillear si la esclerótica, la piel y el color amarillo intenso de la orina son algunos de los indicadores clínicos de ictericia.
Evidencia bioquímica:
Un perfil de la función hepática sérica (que incluye SGOT, SGPT, bilurubina total, directa e indirecta) puede diagnosticar con precisión la ictericia.
Se pueden requerir investigaciones radiológicas como ultrasonido, abdomen de tomografía computarizada o MRCP para investigar la causa de la misma.