Usarlo es diferente de recomendarlo. Lo usaría porque es divertido y puedo dar sentido a un monitoreo “más o menos preciso”.
Dicho esto, uno podría recomendarlo a un paciente dependiendo del tipo de pacientes. Por ejemplo, un paciente hipocondríaco que lo llamará a la medianoche si la lectura del ritmo cardíaco de Fitbit cambió un poco NO es un buen candidato: p
Además, si las cosas son serias hasta el punto que requieren seguimiento y monitoreo continuo, hay dispositivos especiales para eso, en lugar de ‘artilugios’.