No puede cambiar el curso de los errores refractivos con medicamentos, ejercicios o dietas naturopáticos que yo sepa.
Eso no significa que el error de refracción de uno sea inamovible para siempre. La miopía, la hipermetropía y el astigmatismo pueden cambiar en cierta medida a lo largo de la vida. A veces el grado de espectáculo va más alto, y otras veces baja más por sí mismo. Por supuesto, estos cambios también pueden ser causados por cosas como lesiones, cirugía o enfermedad.
Es importante que cuando el poder visual de uno se vuelve menos afortunado, no se lo adscriba a una intervención milagrosa que no tenga plausibilidad biológica. No se deje engañar por las muchas afirmaciones que pregonan la próxima gran cura natural para los errores de refracción.