Ambos son poderosos fármacos psicoactivos y ambos requieren una receta. Y ambos inhiben la digestión hasta cierto punto. Aparte de eso, tienen muy poco en común.
Adderall es anfetamina, un fármaco estimulante que funciona con receptores de norepinefrina y dopamina. Es una droga simpaticomimética, llamada así porque imita los efectos del sistema nervioso simpático. Dilatará sus pupilas, aumentará su frecuencia cardíaca y su presión arterial y le impedirá dormir.
Vicodin es acetaminofén más hidrocodona, un opioide que generalmente se receta para el dolor moderado. Constriñe tus pupilas y te da sueño.