Todavía no existe un medicamento para el control de la natalidad masculina. Hay algunas investigaciones que pueden llevar a esto algún día. Un fármaco fue eficaz para detener la producción de esperma, pero también interfirió con las enzimas hepáticas. Entre otras cosas, sería fatal beber alcohol con esta droga.
Parte del problema es que el sistema reproductivo femenino es muy complicado. Deben darse muchos pasos para ovular, preparar el útero e implantar los óvulos fertilizados. Cada uno de estos pasos está controlado por señales químicas. Debido a que es tan complejo, interrumpir el ciclo no es difícil. Aun así, hay muchos efectos secundarios potenciales.
El sistema reproductivo masculino es fácil. Haz esperma, haz esperma, haz esperma y haz esperma. Es un proceso todo el tiempo. Interferir con esto es difícil sin interferir con otros procesos corporales.
Hasta entonces, tenemos condones.