Eso realmente depende de muchos factores …
1. ¿Con qué frecuencia ha ido al dentista para sus chequeos regulares?
2. ¿Qué tan inflamadas están tus encías?
3. ¿Algún diente cariado en la boca?
4. ¿Suele tener miedo de ir al dentista?
5. Finalmente, ¿qué tan bueno es tu dentista? Un buen dentista puede hacer que cualquier procedimiento desalentador sea muy reconfortante para el paciente.