¿Debo preocuparme por un bache rojo en mi oreja? ¿Qué implicaciones para la salud trae esto?

Para responder a esto, debería haber algunas preguntas más. Cuando dices “en mi oreja”, ¿estás hablando de lo que cuelga en el costado de tu cabeza para sostener tus gafas (la aurícula) o es el canal el que te lleva al tímpano? ¿El golpe rojo duele? ¿Cuánto tiempo ha estado allí?

En última instancia, si duele y es de reciente aparición, es más probable que sea una infección. Puede ser necesario drenarlo (liberar el pus). Es menos probable que un antibiótico ayude.

Si no duele y es de mayor duración, comenzaríamos a pensar en un tumor. Si es oscuro o rojo brillante, podría ser un pequeño hemangioma de poca importancia. Si es un color más claro, podría ser potencialmente maligno y necesitar ser eliminado.

En última instancia, necesita ver a un médico, mejor un otorrinolaringólogo, que esté capacitado para abordar todos los aspectos de la enfermedad del oído de la manera más eficiente (visita a la oficina) y menos costosa posible.

No lo pospongas indefinidamente. Pequeños baches se convierten en grandes baches. ¡Si esperas demasiado, puede que te quedes sin nada para colgar tus gafas!