El síndrome de lágrima de cocodrilo causa que las personas derramen lágrimas mientras comen.
Ocurre cuando un nervio facial que solía inervar una glándula salival se daña y vuelve a crecer por error en una glándula lagrimal. Cuando una persona saliva antes y durante una comida, las glándulas lagrimales se estimulan al mismo tiempo.
A partir de ahora, el tratamiento actual implica la inyección de toxina botulínica (Botox) en la glándula lagrimal afectada. Los efectos se activan en 24-48 horas más tarde y duran de 4 a 5 meses.