El comercio con el marfil continúa porque un producto bien comercializado se vende, independientemente de su utilidad real. Marcas enteras de la industria de belleza y fitness viven de la “charlatanería”.
Se engaña a la gente para que crea que los cuernos y los dientes de estos animales tienen un efecto, lo que crea una demanda, que a su vez puede generar una gran cantidad de fondos, si crea un suministro. Donde hay dinero, hay alguien tratando de llenar un nicho. Dígale a la gente que estos materiales son una cura para TODOS sus problemas y que le creerán y querrán su producto.
Por último, la eductaion sigue siendo un bien escaso y valioso, por lo que no es posible juzgar, por ejemplo, los Chines promedio con los mismos estándares que, por ejemplo, el británico promedio.