Muy bien cuando las cosas salen bien. Cuando ocurren complicaciones las admites y saltas sobre ellas para arreglarlas. Una vez pensé que había 10 pacientes en los que no debería haber realizado la operación electiva. Pensé que eran fracasos. Les pregunté si volverían a hacerlo y 9/10 dijeron que sí. En la cirugía de columna tratamos de mejorar a las personas, a veces curadas, pero la mayoría de las veces significativamente mejor de lo que eran.
Subestimé mis resultados. Me sentí mucho mejor entonces.