Los riñones son órganos en forma de frijol que cumplen varias funciones reguladoras esenciales en los animales vertebrados. Eliminan el exceso de moléculas orgánicas (por ejemplo, glucosa) y es por esta acción que se realiza su función más conocida: la eliminación de los productos de desecho del metabolismo (por ejemplo, urea, aunque el 90% de esto se reabsorbe a lo largo del nefrón). Son esenciales en el sistema urinario y también desempeñan funciones homeostáticas, como la regulación de electrolitos, el mantenimiento del equilibrio ácido-base y la regulación de la presión sanguínea (a través del mantenimiento del equilibrio de sal y agua). Sirven al cuerpo como un filtro natural de la sangre y eliminan los desechos solubles en agua, que se desvían a la vejiga urinaria. En la producción de orina, los riñones excretan desechos como la urea y el amonio, y también son responsables de la reabsorción de agua, glucosa y aminoácidos.
Del lado del humor,
El riñón es un órgano del cuerpo cuyo rendimiento es inversamente proporcional a la cantidad de ingesta de alcohol 🙂