Nada puede evitar totalmente algo en este mundo. Pero, podemos minimizar el impacto. Eso es lo que la atención prenatal apropiada puede hacer para la parálisis cerebral. Lo único es que solo afecta las razones anteriores a la entrega para la parálisis cerebral, así como algunas durante el proceso de parto. Recuerde, la parálisis cerebral tiene causas que pueden ocurrir antes del nacimiento, durante el nacimiento y después del nacimiento. Sin embargo, contrariamente a lo que se cree, el 70% de los casos de parálisis cerebral se deben a eventos previos al nacimiento. Por lo tanto, es muy importante que tenga una buena atención prenatal que implique observar tanto la salud de la madre como la del niño. Mientras más sanos sean ambos, menores serán las posibilidades. Lo único que puedes hacer es minimizar las posibilidades.
Estas son las causas comunes conocidas antes del nacimiento:
- Infecciones: cuando la madre se infecta durante el embarazo, esa infección puede causar daño cerebral en el feto. Las infecciones comunes son el sarampión, el citomegalovirus y la toxoplasmosis. Además, cualquier infección en el tracto reproductivo y urinario también puede ser un factor.
- Rotura y anomalías placentarias: estos eventos pueden causar un suministro insuficiente de oxígeno al feto y, a su vez, causar daño cerebral.
- Prematuridad: los bebés que pesan 3 libras o menos tienen 30 veces más probabilidades de tener parálisis cerebral. Por lo tanto, es esencial poder llevar a un bebé a término completo, lo que hace que la atención prenatal sea esencial.
- Enfermedades de la sangre: la incompatibilidad de la sangre, la enfermedad de Rh, puede causar ictericia que puede ser grave y que resulta en daño cerebral. La madre generalmente se trata en la semana 28 del embarazo con inmunoglobulina Rh. Además, los trastornos de la coagulación sanguínea con la madre o el niño aumentan el riesgo.
- Ictericia severa: la piel y el blanco de los ojos se vuelven amarillos. Si no se trata, esto puede causar daño cerebral permanente. Por lo general, es una ocurrencia común con el tipo atetoide de parálisis cerebral.
- Otros defectos de nacimiento: los bebés que tienen enfermedades genéticas, malformaciones cerebrales y otros defectos físicos tienen un mayor riesgo de parálisis cerebral. La atención prenatal puede controlar algunas de estas enfermedades.
- Desconocido: tuve un paciente con microcefalia en el cual su cerebro dejó de desarrollarse cuando estaba dentro del útero de su madre. La razón era desconocida. Además, tenía una familia que tenía ambos niños con parálisis cerebral pero su proceso de parto transcurrió sin incidentes. Otro con razones desconocidas. Por último, tenía una familia con trillizos, y 2 de 3 tenían parálisis cerebral. Por qué uno no la tiene se desconoce.
Estos le muestran plenamente que una buena atención prenatal sigue siendo esencial.
¡¡¡Dios te bendiga!!!