Hay varias razones:
- Los condones ya existían desde la antigüedad, hechos de intestinos de animales o textiles, y los condones de goma ya se usaban en la década de 1850.
- No todos acudieron a las prostitutas, y la monogamia practicada comúnmente ayudó a frenar un poco la propagación de enfermedades.
- Una infección no necesariamente atrapa desde el primer intento; a veces puede requerir una coincidencia de factores, como un sangrado menor o una inmunidad general baja, para una transmisión exitosa.
- Créalo o no, algunas personas son inmunes a algunas enfermedades de transmisión sexual o desarrollan inmunidad hacia ellas con cierta exposición.
- Algún tratamiento existió, y ayudó.
- No todas las ETS son mortales.
- La propagación geográfica de las enfermedades en aquel entonces era diferente, y su variedad era menor.
Entonces, en general, cada uno de estos factores puede ser relativamente pequeño, pero todos contribuyeron a que “no todos murieron”.