La humedad hace que el aire sea más ligero, pero la humedad alberga hongos, moho, bacterias, ácaros, etc. que desencadenan el asma. En el verano local, dado que la temperatura atmosférica es más alta, el peso de la humedad por unidad de volumen de aire es mucho mayor que en invierno para la misma humedad relativa.
En invierno, es la contaminación del aire generada localmente la que predomina debido a la presencia de inversiones superficiales, mientras que en verano, es el polvo de fuentes incluso distantes el que domina la atmósfera.