No.
Charlie Sheen en algún momento comenzó a ver a un médico alternativo, uno por cierto sin licencia para ejercer la medicina en los Estados Unidos.
Después de suspender el tratamiento estándar y ver un rebote en su carga viral, o la cantidad de virus en su sangre, el actor regresó al plan original de su médico y comenzó a tomar antirretrovirales nuevamente.
Ni el doctor lo curó. Uno podría haberlo matado y haber causado daños irreparables en términos de recuento de células T. El otro lo mantiene vivo y saludable por más tiempo al tratar su VIH. No existe una cura sostenible y fácilmente repetible para el VIH.