La procalcitinona es producida por las células (principalmente en los pulmones y el tracto GI) como respuesta a las toxinas bacterianas, lo que da como resultado aumentos de la procalcitonina sérica en las infecciones bacterianas.
En mi hospital, pedimos regularmente niveles de procalcitonina como una forma de ayudarnos a ver si la infección del paciente es de origen bacteriano o viral (los niveles de proc son realmente reducidos en las infecciones virales).
En términos de dirigir el uso de antibióticos, el nivel de elevación generalmente es consistente con la gravedad de la infección, por lo que puede ser útil cuando se trata de decidir la duración del tratamiento con antibióticos. También lo ordené como una forma de medir qué tan bien está respondiendo un paciente a la terapia con antibióticos, ya que esperaríamos que disminuyera después de al menos unas pocas dosis de un antibiótico.
Normalmente lo ordeno cuando tengo una sospecha de neumonía, pero solo lo uso como una herramienta de diagnóstico complementaria con datos micro, radiológicos y clínicos, en lugar de permitir que tome preeminencia sobre otra información. Nunca debe ser el único factor determinante para iniciar o no un tratamiento con antibióticos.
