Cuando la piel es pellizcada o abofeteada, los nervios debajo de la piel perciben esto como un estímulo de dolor. Cuando esto sucede, los vasos debajo del área se dilatan e intentan traer más sangre. ¿Por qué ocurre este proceso? Es porque el cuerpo está reaccionando a dicho estímulo de dolor al reducir la pequeña cantidad de inflamación que ha tenido lugar. Esta es la razón por la cual el área se siente cálida y roja.
El otro proceso que se lleva a cabo es que debido a la presión de la bofetada o el pellizco de la piel, los capilares diminutos estallan, lo que hace que se filtren. Esto también puede causar enrojecimiento.
El término científico para el primer proceso se llama eritema, lo que significa enrojecimiento de la piel.