Esto puede no tener nada que ver con ser un Pug inglés; puede ser un caso de indigestión.
Al igual que con nosotros, los seres humanos, los perros también tienen molestias estomacales a veces (tal vez por comer en exceso). Por lo general, el problema desaparece en 4-6 horas, después de que la bilis está fuera del sistema. Si el apetito del perro no vuelve a la normalidad en 12-18 horas, debe llevarlo a un veterinario.