Debe haber sido evaluado por el médico y tener una razón para el oxígeno. Esa razón sería hipoxia, o baja concentración de oxígeno en la sangre, por cualquier razón: enfermedad pulmonar, enfermedad cardíaca, etc.
Si desea que el gobierno o el seguro paguen (un problema diferente), debe cumplir con los criterios aceptables para la agencia que realiza el pago.