La cafeína es un estimulante del sistema nervioso central cuyo principal mecanismo de acción es un agonista de la hormona no selectivo de los receptores de adenosina … por lo tanto, un agonista del receptor de adenosina no específico podría ser el opuesto farmacológico de la cafeína.
En el mundo real, ¿tal vez una droga de zombificación? 😉