Depende del país en el que se encuentre. En el Reino Unido, los médicos generales (GP) son los “guardianes de la puerta”, por lo que primero debe ver a un médico de cabecera y él o ella decidirá si consultar o no. Tiene derecho a solicitar una segunda opinión o consultar a un especialista.
Es mejor ver primero a un médico de cabecera ya que la mayoría de los problemas de la piel pueden ser manejados por generalistas.
En el NHS hay un poco de espera para ver a un especialista y en algunos países tiene que pagar para ver a un especialista y no es aconsejable pagar mucho dinero cuando la condición podría haber sido resuelta por un médico de cabecera a un menor costo.