Existen muchos protocolos comprobados de quimioterapia para tratar la leucemia. Estos difieren según el tipo de leucemia.
Hemos mejorado la manera en que tratamos la leucemia increíblemente con el tiempo con el uso de nuevos agentes, combinación y uso del trasplante de médula ósea. Esto se ha demostrado mediante la realización de investigaciones clínicas y ensayos para descubrir cómo podemos tratar mejor el cáncer. Usamos esta información para mejorar nuestra práctica estándar.
Los protocolos de quimioterapia pueden diferir de un país a otro o incluso de un hospital a otro. Sin embargo, los tratamientos generales son similares. Las diferencias nos ayudan a comparar los tratamientos y a conocer cuáles son los mejores para mejorar con el tiempo.
En mi opinión, los mejores ensayos para encontrar los mejores tratamientos que eviten el sesgo clínico son los ensayos prospectivos de control aleatorizado.
También podemos aprender mucho de los datos retrospectivos de los protocolos de tratamiento bien realizados.
Los pacientes en el mismo ensayo clínico se tratan con el mismo protocolo. Esto permite una comparación precisa de los resultados.
De lo contrario, los pacientes reciben el mejor estándar de cuidado disponible para ellos en su región. Esto puede variar de un lugar a otro.
