También hay un impulso para hacer que los datos de atención médica sean más transparentes para mejorar el costo y la eficiencia de cómo se brinda la atención médica.
Si ha visitado a su médico recientemente, probablemente haya visto o escuchado que su consultorio está en proceso de implementar registros médicos electrónicos. El objetivo de estas iniciativas es que los médicos puedan brindar un mejor tratamiento en última instancia.
De hecho, para 2014 los médicos deberán tener registros electrónicos de salud en su lugar. Se avecinan muchas preguntas sobre a quién pertenecen sus datos; y si bien puede parecer simple, no es tan sencillo.
La propiedad de los datos es un tema delicado, y los consumidores deben comprender cuáles son realmente sus derechos.
Cuando vaya al médico y le realicen un examen, previamente (y tal vez incluso algunas veces, ahora) su médico le escribiría una nota, o dictará una nota, en su tabla. Hoy, su médico probablemente escriba una entrada en sus registros electrónicos, que puede ver en línea.
Conforme a las leyes federales y estatales, los pacientes tienen seguridad legal de privacidad y derechos de precisión relacionados con su información de salud. Pero una vez que se ingresa la información en el sistema, su médico se convierte en el custodio legal de su registro y se le otorgan derechos y deberes legales específicos relacionados con la posesión y protección de este registro.
Los consumidores tienen derechos de privacidad que protegen sus registros, así como los derechos de precisión, y si notan algún error, podrían sugerir correcciones o ediciones, pero no podrán hacerlo por sí mismos. Además, los consumidores también tienen amplios derechos, pero no ilimitados, a la divulgación de información de los registros médicos a terceros.
Si se proporciona una copia del registro médico al paciente, pueden eliminar esa copia, pero el registro maestro con el médico no se puede eliminar. También es importante entender que, si bien el paciente tiene derecho a anexar su historia clínica bajo HIPAA, la ley no exige que esta enmienda afecte la versión maestra del registro del consumidor, pero puede residir en algún lugar dentro del archivo.
Los médicos pueden corregir su copia de los registros médicos electrónicos siempre que conserven una copia de la versión incorrecta.
Habrá desafíos aún mayores que surgen en lo que respecta a los datos de reclamaciones médicas. Actualmente, si obtiene una cobertura de seguro a través de su empleador, es el empleador quien tiene los derechos sobre los datos de reclamos y usted, como empleado, también podrá acceder a dichos reclamos.
En los mercados de seguros de salud, los consumidores deberán garantizar la privacidad y el control de sus datos. Supongamos que cambia de una aseguradora a otra en los mercados, ¿cómo podrá mantener los reclamos de su proveedor anterior y dónde se almacenará esa información?
Para complicar aún más la situación, hay un enfoque renovado en las iniciativas de bienestar y prevención que crea nuevos problemas con el control de datos y la privacidad. Asuma el ejemplo de un empleado que está participando en un programa de bienestar corporativo y está siguiendo su rutina de ejercicios y su dieta a través de un dispositivo y / o una aplicación de iPhone. ¿A quién pertenece la información de ese empleado? ¿Es el empleador quien paga el programa de bienestar corporativo? ¿Es el fabricante del dispositivo? ¿Es Apple? ¿Es el consumidor? ¿Es la compañía de seguros?
La respuesta más pragmática a esto es, por supuesto, el consumidor, como el principal propietario de cualquier dato de salud sensible.
El jurado todavía está deliberando, si cualquiera de las otras partes mencionadas anteriormente puede, y va a reclamar, derechos sobre estos datos a los fines de establecer las primas de seguro, copagos y propósitos publicitarios.
Hay una industria totalmente nueva que explota en torno al fenómeno de Big Data. Las empresas de Facebook a Twitter y Amazon usan Big Data como su activo principal para generar ingresos. La cantidad de información que Facebook recopila sobre un individuo cada vez que hacen clic en “Me gusta” es extraordinaria. En lo que respecta al cuidado de la salud, las sensibilidades son mucho mayores, pero en este nuevo entorno de mercados libres y transparencia, puede esperar fuertes batallas sobre la propiedad de sus datos personales.
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