Me parece poco probable que haya una disminución notable en las tasas de infección en la población general. Los efectos de las toallitas antibacterianas y similares son más notables en áreas con alto tráfico de gérmenes, como hospitales y escuelas. En cuanto al público en general, estos productos pueden conducir a cepas de bacterias / virus más resistentes. Esto se debe al hecho de que las toallitas y similares no matan a todos los gérmenes en una superficie y los que quedan atrás tienen una posibilidad de volverse resistentes a cualquier sustancia antibiótica que se use. Estos podrían propagarse y las cepas resistentes pueden volverse más prevalentes y provocar enfermedades peores. Un gran ejemplo es XDR-TB (tuberculosis extensamente resistente a los medicamentos). Aunque esta enfermedad se relaciona más con los antibióticos que se usan en el tratamiento de la enfermedad, el proceso es similar. Puede leer más sobre esto aquí si desea http://en.wikipedia.org/wiki/Ext…. También está el hecho de que muchos de los productos antibacterianos, como los geles desinfectantes, contienen cierta cantidad de alcohol que puede resecar / agrietar la piel si se los usa en exceso. Esto puede conducir a una mayor probabilidad de infecciones por patógenos en la superficie de la piel ya que la barrera física proporcionada por la piel se rompe.
En resumen, estos productos solo deberían usarse en situaciones en las que tenga una alta probabilidad de contacto con patógenos como los mencionados anteriormente y solo serían realmente perceptibles en estas situaciones. El uso excesivo por parte del público en general puede aumentar las tasas de infección o al menos aumentar la gravedad de las infecciones. Me doy cuenta de que esta respuesta es una ligera desviación de la pregunta original, pero creo que demuestra por qué no vería una reducción drástica de las tasas de infección entre la población en general.
