Comer helado no es más dañino que cualquier otro alimento preparado adecuadamente durante el embarazo. Se supone que usted debe comer sano (por su bien y por el de su bebé) durante el embarazo, pero debe sentirse libre de disfrutar lo que come.
Las dietas deficientes durante los embarazos se han relacionado con una variedad de problemas (por ejemplo, uno sugiere que los alimentos no saludables como los alimentos procesados / productos horneados aumentan los síntomas del TDAH en los niños). Pero como ocurre con la mayoría de los estudios, generalmente no existe una relación definida exacta (es decir, si usted come helado, su hijo tendrá una afección). Dicho esto, si está siguiendo una dieta restringida según las instrucciones de su médico (por ejemplo, si tiene diabetes gestacional), sería bueno que lo haga.
El único otro daño causado por comer helado durante el embarazo es el riesgo de listeria. El helado no está en la lista de fuentes habituales de listeria, pero algunos recuerdos de helados de alto perfil relacionados con la listeria podrían ser motivo de preocupación. La listeriosis es muy grave durante el embarazo, con resultados muy negativos y potencialmente fatales para el feto. Pero la contaminación por listeria todavía es bastante rara en los helados, por lo que no debería ser una preocupación importante.
Respuesta corta: no es dañino. Debe sentirse libre de complacerse, con moderación. Historia personal: Comí MUCHO helado durante mi embarazo, así como también después (mientras amamantaba). Creo que valió la pena.