- Patrones de sueño: los bebés duermen alrededor de 30-60 minutos mientras están en el útero, pero este ciclo también puede extenderse a 90 minutos. También puede notar menos movimientos cuando está ocupado, es decir, durante el día.
- Desprendimiento de la placenta: esto sucede cuando la placenta se separa de la pared uterina. Aunque esto a veces es normal y puede sanar por sí mismo. A veces necesita intervención médica. Por lo tanto, asegúrese de contactar a su médico si su bebé se mueve menos de sus patrones habituales.
- Estrés materno o problemas nutricionales: El estrés emocional puede causar fácilmente que los bebés se angustien también. El ayuno o la deshidratación también pueden irritar al bebé. Así que asegúrese de comer y beber tan pronto como tenga hambre.
- Ruptura prematura de la membrana: esto ocurre cuando el saco amniótico se rompe o se filtra el agua. Es normal cuando está a término completo, pero si ocurre antes que ir al médico inmediatamente.
- Hipoxia fetal: una afección muy rara en la que el cordón umbilical no puede suministrar oxígeno al bebé. Esta es una condición fatal y necesita atención inmediata.
Lo primero que debe hacer después de haber alcanzado alrededor de 24-25 semanas o cuando su bebé comienza a moverse es seguir sus movimientos. Reserve un tiempo para hacerlo todos los días.
El patrón se vuelve regular solo después de las 30 semanas de embarazo. Si en algún momento, especialmente al final del embarazo, siente que el bebé se ha estado desviando de sus movimientos, entonces es cuando debe comunicarse con su supervisor médico.
Varias aplicaciones como Kickme – Baby Kicks Counter – Las aplicaciones de Android en Google Play son muy útiles a la hora de contar los movimientos.