Los aceites esenciales que contienen b-asarona o d-pulegona pueden aumentar los efectos tóxicos de algunos productos farmacéuticos porque ambos inducen la enzima desintoxicante del citocromo P450. Las progesteronas (píldoras anticonceptivas) y la difenhidramina (Benadryl) son dos ejemplos que podrían tener resultados adversos cuando se usan en combinación con gaulteria, semillas de zanahoria cultivadas, cálamo y pennyroyal. Sin embargo, Tisserand y Balacs (1995) afirman que la cantidad de exposición a estos aceites esenciales para la aromaterapia es insignificante y no representa un riesgo. Una revisión de la literatura muestra que aquellos que están medicados con medicamentos anticonvulsivos deben ser cautelosos al usar aceites esenciales, ya que sus medicamentos pueden reducir la efectividad de su medicamento.
Fuente: Aceites esenciales: toxicidad y contraindicaciones | Creer servicios de partería