La abstinencia es una recomendación inútil para los adolescentes. Recuerdo lo que se sentía tener hormonas crecientes, curiosidad insaciable y poca consideración por las consecuencias de mis acciones.
La educación es importante, muy importante. Los adolescentes deben saber todo sobre los mecanismos para quedar embarazada y los métodos para evitar un embarazo no deseado. Además de eso, deberían sentirse libres para explorar, cuestionar y criticar lo que se les enseña: esa es la diferencia entre aprender y simplemente ser sermoneados.
El control de la natalidad debe ser libre, accesible y privado (para todos los géneros). Cualquier adolescente en cualquier circunstancia debe poder acceder a varias opciones de control de la natalidad sin el requisito de involucrar a sus padres. En general, creo que los servicios de planificación familiar (sí, TODOS) deberían estar disponibles gratuitamente para cualquiera que sea capaz de reproducirse.
Por último, algo que no creo haber visto tocado, es criar a los niños para que sean adolescentes asertivos y seguros de sí mismos. Un adolescente seguro de sí mismo cuidará de sus propios intereses por encima de los deseos de los demás, puede abogar por lo que quiere. Pueden decir que no a la presión de grupo. Pueden conocerse a sí mismos y tomar mejores decisiones.