Cómo vivir tu vida social si tienes una enfermedad neurológica

No soy un experto de ninguna manera, forma o forma, pero en el campo en el que trabajo hay muchas maneras para alguien que tiene el desafío de tener una vida social. Hay muchas organizaciones que ayudan a que esto suceda, como Easter Seals, United Way, la Agencia para Personas con Discapacidades (APD aquí en Florida), sus servicios sociales locales, su iglesia (o iglesias si no pertenece a una), escuelas y redes. Tenemos una organización llamada Sparc (Política Deportiva e Investigación Colaborativa) que es a través de los Servicios Humanos y de Salud, y la Universidad de Florida ( sparc .hhp.ufl.edu). ” El propósito de SPARC es producir investigaciones relevantes y oportunas que aborden el deporte como un facilitador de la salud física, social y emocional de las personas y la salud económica de las comunidades “. Esto no solo incluye deportes (como pesca, bolos y otras actividades grupales) sino también fiestas, picnics, bailes y otras formas de reunir a un grupo de personas en la comunidad, independientemente de los desafíos que las personas puedan enfrentar. La mejor manera de encontrar una red u organización para satisfacer las necesidades de una persona es llamar a United Way o a los servicios de Salud y Humanos y pedirles referencias de una agencia. Una persona también tiene redes sociales como Facebook, My Space y Twitter para buscar personas que puedan interesarle o encontrar una buena pareja. No sé si esto ayuda, ¡pero espero que sí! 😀

Eso realmente depende de lo que es la enfermedad y de la gravedad de dicha enfermedad. Tengo epilepsia, y mi medicación mantiene a raya mis convulsiones en su mayor parte, por lo que puedo vivir una vida social bastante normal. Sin embargo, si tuviera convulsiones más frecuentes y / o incontrolables, me imagino que sería mucho más difícil. Probablemente no podrá conducir, por lo que usar el transporte público ayudaría con eso. También necesitaría amigos que saben y aceptan que podría tener un ataque en cualquier momento, y que sabían cómo manejar esa situación (primeros auxilios, etc.).

En cuanto a otras enfermedades neurológicas como la parálisis cerebral o el síndrome de Tourette, realmente no puedo decirlo porque no tengo ninguna experiencia de primera o segunda mano con ellos. Me imagino que serían similares, sin embargo.

Además de los buenos consejos que se ofrecen aquí, te pediría que intentaras descubrir quién eres en realidad, y no estoy hablando de métodos de autoayuda y formas, sino de una búsqueda espiritual por la cual se pueden encontrar respuestas únicas. Y no necesariamente a través de la religión sino a través de buenos maestros en espiritualidad, como Rupert Spira, Francis Lucille y otros; mire también en ‘Advaita Vision’, donde se tratan estos temas importantes, como en las preguntas y respuestas. Si lo haces, las preguntas sobre una ‘vida social’ se alejarán de tus intereses, al menos hasta cierto punto. Con suerte, puede hacer algo de esto, dependiendo, por supuesto, de su discapacidad y también su motivación (si no puede leer, es posible que pueda escuchar videos, CD, etc.