¿Hay alguna diferencia entre sangre húmeda y sangre seca bajo el microscopio?

¡Por supuesto! Si miras un montículo húmedo de sangre, verás una gran cantidad de glóbulos rojos y unos pocos glóbulos blancos nadando, pero no podrás ver muchos detalles porque se están moviendo y no hay mucho color contraste.

Un tobogán seco se vería muy pálido y no se podían ver muchos detalles.

Sin embargo, si manchas el portaobjetos con tinte tal como lo hacen en los laboratorios y luego lo resecas verás mucho más. Verá glóbulos rojos y blancos con varias incisiones celulares. Podrá identificar los diferentes tipos de glóbulos blancos y podrá identificar células más jóvenes que tal vez no deberían aparecer en la sangre periferal. Verá pequeñas plaquetas que juegan un papel en el sistema de coagulación de la sangre. También puede ver anomalías celulares que pueden indicar un proceso de enfermedad. Los toboganes teñidos son mucho más divertidos.