Los ataques de pánico y la ansiedad son más o menos lo mismo. Causan una respiración pesada activando el sistema de lucha o huida del cuerpo: la adrenalina bombea hacia la sangre y estimula al corazón a latir más rápido, y la respiración aumenta para tener suficiente oxígeno para luchar o huir de lo que sea que esté causando la ansiedad.
Otras cosas que pueden causar aumento de la respiración (respiración pesada): asma, alergias, condiciones de dolor crónico como fibromialgia, EPOC (trastorno pulmonar obstructivo crónico), enfisema, esfuerzo excesivo (actividad física extenuante).
Hay muchas posibilidades Para reducirlo, sería necesario conocer el contexto de la situación, lo que sucedió inmediatamente antes de que comenzara la respiración pesada y la condición física del paciente.