Parecería que ‘MHC y selección sexual’ es decir. química, no debería ser relevante en mujeres después de la menopausia, pero lo es. ¿Cómo?

Después de la menopausia, los circuitos de su cerebro no se reconectan por completo. Los mecanismos evolutivos para la selección sexual son un patrimonio escrito en nuestro ADN. Nuestro ADN no conoce ni se preocupa por la menopausia; hace lo que hace y los dones biológicos que nos hereda no se recuperan en el momento en que ya no podemos tener hijos.