Una sensación tensa en el pecho, hinchazón de barriga, una salpicadura ardiente que deja un sabor amargo en la boca. Lo más probable es que hayas lidiado con este evento doloroso y desagradable en algún momento.
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Más de 60 millones de estadounidenses experimentarán acidez estomacal al menos una vez al mes, y 15 millones la padecen a diario, según la Asociación Estadounidense de Gastroenterología. Conocido clínicamente como enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), el reflujo ácido se refiere al flujo de ácido del estómago hacia el esófago, irritando el tubo que conecta la garganta con el estómago.
Tomar medicamentos con mucha agua, evitar las comidas a altas horas de la noche y esperar al menos dos horas antes de acostarse puede ayudar, pero cambiar la dieta puede ser la mayor diferencia.
Los desencadenantes de acidez estomacal varían de persona a persona, pero las carnes procesadas, alimentos fritos, productos horneados, especias, cítricos, alcohol y refrescos son algunos de los peores ofensores que promueven la acidez.
“Rellenar las proteínas de origen vegetal y hacer más comidas y refrigerios a base de vegetales y frutas puede ayudar”, aconseja Jaclyn London, MS, RD, CDN, directora de nutrición del Good Housekeeping Institute. “Si sientes que regularmente estás sufriendo de ardor de estómago e indigestión, considera mantener un registro de alimentos para ayudar a detectar desencadenantes potenciales”.
Si bien ningún alimento en realidad previene o revierte la ERGE, Bella afirma que algunos podrían ayudar a aliviar la quemadura interna. “No hay una gran cantidad de evidencia para respaldar estas afirmaciones, pero los siguientes alimentos se han demostrado anecdóticamente y en una serie de estudios pequeños para aliviar los síntomas asociados con el reflujo”, dice.
Las personas han usado esta planta verde como un agente de curación desde tiempos bíblicos, y aún recurren a la medicina tradicional para irritaciones de la piel, quemaduras, estreñimiento y diabetes tipo 2, así como también trastornos gastrointestinales. “Se han sugerido sus propiedades antiinflamatorias para aliviar la inflamación en el esófago causada por el reflujo”, dice Bella.