Lo que estás viendo en la película es una simulación de paralizar a la víctima al romper su médula espinal en el tallo cerebral. Esto podría suceder lo suficientemente alto como para paralizar las funciones autónomas, como la respiración. O en la parte superior del cuello, lo que dejaría a la víctima cuadripléjica, incapaz de mover sus extremidades.
Por supuesto, en la práctica, tal daño puede variar de parcial a completa, vértebra rota que necesita un collar, o simplemente un esguince grave. Pero en las películas no hay medias tintas.
Si tuvieras que decir que esta técnica es muy utilizada, especialmente en comparación con su efectividad en la vida real, casi todos en la profesión médica estarían de acuerdo contigo.