Si alguien me decapitara y conectara mi cabeza con el cuerpo de otra persona decapitada y de alguna manera la entidad combinada sobreviviera, ¿sería yo o la otra persona?

Bueno, por la situación dada aquí surge una doble perspectiva.

La cara que ve la gente será tuya. Su cabeza significa su mente, es decir, su cerebro, por lo tanto, usted será el único que tomará las decisiones sobre los asuntos externos de la entidad combinada y usted será responsable de su mejor supervivencia. Qué hacer qué no será decidido por usted. La apariencia total de la entidad combinada para el mundo se basa en tus acciones, y las acciones se generan exclusivamente desde la mente, ya que la mente es tuya. Cualquier persona con la que interactúe la entidad combinada será “tú”.

La gente hablará sobre ti, te juzgará, será tu amigo.

Todo este tiempo el cuerpo estará debajo del vestido que decidas usar.

Luego, cuando llegues a casa al final del día desvistiéndote de la cobertura social, en el fondo recordarás que si el corazón deja de latir algún día, la entidad sería igual que cualquier modelo de arcilla. Es el corazón dentro del cuerpo el que bombea la sangre, que es suficiente para la existencia de la entidad.

Para sobrevivir, primero tienes que existir.

Para la sociedad, serás tú, hasta la muerte de la entidad. La fotografía después de la muerte también tendrá tu cara. La cara que recordarán será tuya.

Para ti, será el cuerpo.

Querido Arnab: La nueva persona creada será tú.