Ha habido algunos estudios sobre esto, pero ninguno de ellos tuvo un resultado definitivo.
En aproximadamente el 30% de los sujetos con H. pylori en la mucosa gástrica, la bacteria también se puede encontrar en la boca. Sin embargo, es bastante seguro que no existe una colonización estable de la cavidad oral y que el microorganismo solo está presente de forma transitoria debido al reflujo gastroesofágico fisiológico o patológico.
Es altamente improbable que pueda estar involucrado en infecciones bucales, pero no se puede descartar la transmisión oral.
Sin embargo, la carga bacteriana es bastante baja en la boca y difícilmente puede causar una infección si se transmite a otra persona. Es bastante más probable que la transmisión oral pueda ocurrir entre la madre y el niño (obviamente no a través de besos sino por el contacto cercano entre las bocas) ya que los niños son más susceptibles a las infecciones y las cargas bacterianas más bajas podrían ser suficientes.
Para concluir, con el conocimiento actual y los resultados de diferentes investigaciones podemos decir que es altamente improbable que H. pylori pueda transmitirse a adultos inmunocompetentes a través de besos.
