Si sigue un estilo de vida saludable durante y después del tratamiento, las posibilidades son menores, pero no nulas. Si no sigue un estilo de vida saludable, las posibilidades son tan buenas como las de cualquier otra persona.
Estilo de vida saludable = Comida nutritiva y saludable a tiempo, buen sueño de 8 a 9 horas y ejercicio regular.