Cuando sudas excesivamente solo en las palmas, se llama hiperhidrosis palmar . El hiperhidrosis Palmar afecta aproximadamente al 1 por ciento de los estadounidenses, generalmente a partir de la niñez o la adolescencia [fuente: Cedars-Sinai]. Las víctimas de la afección pueden encontrar que sus palmas sudorosas interfieren con las tareas cotidianas, como escribir o sostener objetos, y pueden sentirse avergonzados de dar la mano o tocar a otra persona porque el sudor gotea incontrolablemente de sus manos. Mientras que los profesionales de la salud pueden medir la cantidad de sudor que se produce en las palmas, por ejemplo, cantidades de sudor mayores a 20 miligramos por minuto son reconocidas como una condición médica tratable, generalmente es una determinación de la calidad de vida que finalmente lleva a los pacientes a buscar profesionales diagnóstico [fuente: Stolman].
La gente a menudo piensa que el estrés emocional (en oposición al estrés físico o las altas temperaturas) causa palmas excesivamente sudorosas, pero en realidad es un sistema nervioso hiperactivo lo que está detrás del problema. Específicamente, el sistema nervioso simpático está funcionando mal. Ese sistema crítico controla las funciones corporales básicas y automáticas, como el latido de tu corazón, la dilatación de la pupila, la respuesta de lucha o huida e incluso el rubor. También regula la temperatura de su cuerpo y los nervios que estimulan las glándulas sudoríparas para producir sudor.
Cuando el sistema nervioso simpático está demasiado activo y estimula demasiado las glándulas sudoríparas, producirán más sudor de lo necesario para regular la temperatura corporal. Si bien nadie está seguro de por qué el sistema nervioso simpático a veces actúa de esta manera, diferentes tratamientos pueden calmar toda la actividad.
Los tratamientos para la hiperhidrosis palmar varían, pero a menudo comienzan con antitranspirantes de potencia de prescripción aplicados a las palmas de las manos. Otra opción son las inyecciones de botulinum (más comúnmente conocidas como Botox), que bloquean las señales a los nervios en la superficie de las manos. Y la estimulación eléctrica (conocida como iontoforesis) actúa paralizando las glándulas sudoríparas, disminuyendo a su vez el volumen de sudor que producen. Lo que funciona para una persona puede no serlo para otra, de modo que los médicos determinarán cuál es la mejor opción para usted al observar la gravedad de su afección y qué tan bien tolere las terapias.
Fuente – HowStuffWorks – ¡Aprenda cómo funciona todo!