¿Realmente creen los estadounidenses que no se merecen una promesa de asistencia médica financiada por el gobierno como la de Canadá, Alemania o el Reino Unido?

Tal vez, pero la pregunta más esclarecedora es “¿Realmente creen los estadounidenses que otros estadounidenses no merecen una promesa de asistencia médica financiada por el gobierno como la de Canadá, Alemania o el Reino Unido?”

A esa pregunta, yo respondería de manera inequívoca y descarada ‘sí’. Parte del problema para obtener atención médica universal o cobertura de salud en cualquier parte de los Estados Unidos es que muchos estadounidenses se consideran a sí mismos, sus familias, sus organizaciones y sus comunidades merecedores, pero al mismo tiempo encuentran a ‘otros’ estadounidenses, sus familias, sus organizaciones y sus comunidades como indignas. La mayoría de los estadounidenses que objetan objetos se basan en esta idea subyacente. “Todos los demás” abusarán y jugarán con el sistema, y ​​lo estropearán para el resto de nosotros. Bienvenido al concepto muy estadounidense de ‘Falla de alguien más’.

Obviamente un número lo hace. Principalmente conservadores que no quieren desprenderse de ningún dinero que pueda beneficiar a alguien que no sean ellos mismos y ellos solos.