Para la presión arterial alta, los diuréticos, comúnmente conocidos como “píldoras de agua”, ayudan a su cuerpo a eliminar el agua y la sal innecesarias a través de la orina. Deshacerse del exceso de sal y líquidos ayuda a disminuir la presión arterial y puede hacer que sea más fácil para su corazón bombear. Los diuréticos se pueden usar para tratar una serie de afecciones relacionadas con el corazón, que incluyen presión arterial alta, insuficiencia cardíaca, problemas renales y hepáticos, y glaucoma.
Al beber más líquidos, usted estaría desempeñando el papel opuesto a los diuréticos.